¿Cómo ganarme la confianza de mi hijo adolescente?

¿Por qué algunos hijos adolescentes tienen una confianza absoluta con sus padres, mientras que otros los consideran hasta unos completos extraños? ¿Qué puedes hacer tú para que tu hijo púber y/o adolescente te vea como un buen amigo y no como un padre malhumorado? ¿La confianza con un hijo adolescente se puede recuperar?

#1. Haz parte de su proceso


Es claro que la confianza no se gana de un día para otro y menos la de un hijo/a, por esta razón nosotros como padres debemos estar presentes desde una edad  temprana con ellos y no perdernos la oportunidad de crear cimientos sólidos en él/ella, inculcando principios y valores que a la brevedad le servirán para vivir una vida plena, brindando en todo momento  amor  y apoyo incondicional.

#2. Coherencia señores, coherencia señoras


Coherencia en lo que dices y haces, de nada sirve decir pero no hacer esto no tiene ningún sentido para tus hijos, la mayor parte del tiempo nuestros hijos no prestan atención a lo que les decimos, les entra por un oído y les sale por el otro, pero si nos observan constantemente y emulan nuestros comportamientos, por esto es de suma importancia dar ejemplo, si les decimos no llegues tarde a clases, pues yo no le  llegó tarde  a el/ella al cine.

#3. Hablen  como  loros


En realidad la mejor forma de ganarse la confianza de un adolescente es hablar lo más recurrente posible, esto permite estar al tanto de lo  que acontece con su vida privada claro está si el/a esta dispuesta a contarlo, así  podrás saber cómo se siente, que ha pasado en su día, hablar del trabajo, temas en común, motivaciones y metas, de seguro lograras  estrechar lazos sólidos y demostrarle que puede contar contigo en todo momento.

#4. Compartan tiempo  de calidad juntos


No hay mejor manera de conocer a tu hijo/a que pasando tiempo juntos, mientras más tiempo pasen juntos tendrás la oportunidad de conocerse mutuamente, salgan de viaje, vayan a cine, cocinen el domingo en la tarde empanadas, cuenten chistes; de esta manera generarás mayor conexión y por ende confianza con tu hijo/a, entre más cómodo se sienta tu hijo/a contigo más chance te da de que cuando le preguntes algo te responda con honestidad y no te oculte cosas realmente importantes.

#5. Intenta no perder la cordura


Por más delicada que esté la situación con tu hijo/a, por más defraudado/a o malgeniado/a que estés intenta no perder la cordura, esto quiere decir que jamás trates de mala manera a tu hijo/a, no insultes, no golpees, siempre trátalo  o trátala  con el mayor respeto así sea  un esfuerzo  extra para ti, de esta manera le demuestras que es importante para ti y que a pesar de lo sucedido la quieres y valoras como siempre, de esta manera lograrás confianza de parte de ella hacia y podrán resolver lo sucedido de la mejor manera sin recurrir a actos y palabras que deteriores la buena relación entre los dos.

Conclusiones:


En el transcurso de la adolescencia de nuestros hijos, nosotros como padres nos es de gran interés lograr que su confianza se mantenga en ésta etapa determinante de sus vidas. Pero en ocasiones pareciera que dicha confianza disminuyó (sea leve/gravemente), y es ahí que comienza a acrecentarse el deseo por querer aumentar la confianza con él/ella y tal vez sea esa la razón por lo cual llegaste hasta el final de éste articulo. Déjame reafirmarte que todo, va a depender  de:

  • El tipo de personalidad que tú y tu hijo/a posean: si es parecida o distinta, ya que eso influye directamente en el trato que puedan tener y desarrollar.
  • Tu compromiso y Honestidad: ya que para lograr obtener la confianza plena de un adolescente, es necesario que te muestres comprensivo, sereno y amoroso al momento de comunicarte con él sea una simple conversación de padres a hijos o bien una reprimenda. Trabaja en tu dominio propio para lograr éste objetivo.
  • Respeto: por más que quieras saber qué es lo que acontece en su vida cotidiana, lo que pasa por su mente y cómo se siente debes de mantener y respetar su derecho a privacidad, esto no quiere decir que no le preguntes nada, no nada de eso, sino más bien que cuando le preguntes y no te quiera contestar no lo agobies, en el momento determinado él/ella por sí mismo lo hará.

Y recuerda, todo lo que se hace con constancia y amor se puede alcanzar.